Mano de Obra: el bloqueo colectivo a la sana convivencia
- Alberto
- 8 oct 2020
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 14 oct 2020

Mano de Obra es la ópera prima del director mexicano David Zonana que, además produce junto al también director Michel Franco y Eréndira Núñez Larios. El guion corre a cargo del propio Zonana, una historia que ha sido presentada en varias competencias como el Festival Internacional de Cine de Toronto, el de San Sebastián y el BFI de Londres. Obteniendo buenas criticas en cada uno de ellos.
La cinta se desarrolla en una opulenta casa que conforma una zona residencial en la Ciudad de México. Ahí un grupo de albañiles realizan los trabajos de construcción pues ésta aún no está finalizada.
Es en su primera e impactante escena donde Claudio cae fatalmente de un alto piso de la construcción provocándole la muerte inmediata. Luis Alberti, quien da vida magníficamente a Francisco es el encargado de buscar justicia para su hermano pues era la única familia que tenía, él y la viuda que dejó después del incidente. A lo largo de un primer tramo del largometraje somos testigo de los atropellos, de los cuales, tanto Francisco como sus compañeros de obra son victimas: la nula protección en sus labores, los abusos en la liquidación completa de sus salarios, las 'largas' que contratistas y 'patrones' le dan a Paco para no indemnizar a la familia de su hermano.
Veremos una importante evolución en la psicología de su personaje principal, de ser un trabajador sumiso, humilde a la hora de exigir lo que por ley le corresponde a su hermano, solidario con sus colegas; hasta, verlo abusar de su posición luego de adueñarse de la casa para la cual trabajaba.

Lo anterior, luego del hartazgo de no tener respuesta por parte de sus superiores con el pago de compensación; además, del fastidio que le genera las condiciones de vida que lleva. Es aquí donde Mano de Obra comparte paralelos importantes con la destacada Parasite de
Bong Joon-ho. Ambas cintas denuncian la desigualdad social, son películas que contrastan ambos polos económicos (dato curioso, las dos lo asocian con la lluvia), y durante su segundo acto retratan la lucha voraz entre las clases bajas de sus atmosferas.
Una vez que Francisco logra instalarse en su nueva casa, invita a los que lo acompañaran en la construcción de la misma para formar parte de este 'hogar', aún en él quedan rastros de la bondad que mostró en un principio para apoyar a quien lo necesite, igualmente me atrevo a decir que la soledad empuja tal propuesta, y finalmente, la presunción de haberse adueñado de algo a lo que sólo aspiró. Dicha propuesta de la que más tarde se arrepentirá.
Comienza el desfile de gente en la propiedad, cada invitado instala a más de sus familiares en los amplios espacios del terreno; tal secuencia recordando Viridiana de Luis Buñuel cuando la interpretada por Silvia Pinal hospeda a gente en el albergue que improvisa en casa del tío; de hecho, cierta escena, de la película que involucra una mesa redonda, me remonta a la postal de la ultima cena que interpretó Buñuel en aquel entonces. No sólo el recuerdo icónico; sino, conceptualmente lo que asemejan: una metáfora de la sociedad y este impedimento colectivo a la convivencia. Este tramo del film dará mucho de que hablar, pues, y adelantándome a la conversación, se podrá pensar que se retrata a este sector del demográfico mexicano como problemático o conflictivo. No obstante, esto es algo que sucede, en ocasiones y bajo la justificación que presenta la cinta. Para eso es el cine para retratar realidades, crear preguntas y cada quien tomar las determinaciones correspondientes.
Busquen Mano de Obra que ya está en cartelera y comenten que les pareció esta gran cinta. Gracias :)

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